Barcelona, una de las ciudades más visitadas del mundo, ofrece varios lugares de gran interés para el turista. La ciudad reúne una combinación perfecta de cultura, historia y ocio para el visitante. Características que le han valido para ser considerada por muchos como la capital del Mediterráneo. La entrada puede ser por tierra, mar y aire. Después de la ruta por Cataluña para los amantes del surf, de las vistas; o el recorrido por los pueblos con más encanto de la provincia, hoy toca una ruta en coche por Barcelona.
Con más de 1,6 millones de habitantes, Barcelona es la segunda ciudad más poblada de España. Situada al noroeste de la Península Ibérica, su ubicación a los pies del Mediterráneo le dota de un clima templado, donde predominan claramente los días soleados frente a los lluviosos. Además, frente al mar, la Ciudad Condal queda «escoltada» al este por una montaña muy especial, el Tibidabo.
Allí empezamos la ruta en coche por Barcelona. Desde su cima, junto al parque de atracciones que toma su nombre, hay unas vistas maravillosas de la ciudad. A 512 metros de altura se pueden ver alguna de las siguientes paradas. No adelantemos nada, que Barcelona tiene mucho por descubrir. La carretera por la que bajamos en coche tiene unas cuantas curvas de herradura por la que irás aproximándote a la zona urbana (mucho ojo: seguro que encontrarás cicloturistas a tu paso).
La segunda parada por este recorrido es la Sagrada Familia. Como la Torre Eiffel a París, la inacabada obra de Gaudí es para muchos turistas la principal postal de Barcelona. En construcción desde 1882 y con previsión de que se acabe en 2026 –año del centenario de la muerte de Gaudí–, es uno de los espacios más visitados de toda España. Y por qué no decirlo: a pesar de las grúas, un templo espectacular que, como sus torres, proyectan la imagen de la ciudad al mundo.
Paseo de Gracia, la calle más emblemática de Barcelona
La ruta en coche por Barcelona continúa atravesando una de sus arterias principales, Paseo de Gracia. Se trata de unas de las calles más famosas, concurridas y con más glamour de la ciudad. Además de encontrarse con tiendas de primeras marcas, el visitante se topará con alguno de los principales tesoros modernistas que esconde Barcelona. Imperdible la Casa Milà, conocida popularmente como «La Pradera», construida por Antonio Gaudí. La Casa Lleó Morera (obra de Lluís Domènech i Montaner), la Casa Ametller (de Joan Puig i Cadafalch) y la Casa Batlló (Gaudí) son otros edificios de obligada visita, o por lo menos, contemplación.
En dirección al litoral, la ruta en coche por Barcelona pasa por Plaza de Catalunya, centro neurálgico de la ciudad. Además de por ser un punto de encuentro y de reunión para los barceloneses, se trata de un eje vertebrador en el que confluyen sus principales vías: Rambla de Catalunya, Avenida Diagonal o la avenida de la Rambla.
Con 1,3 kilómetros de longitud, la Rambla es una de las calles más conocidas, no solo de Barcelona, sino también de España. Bajando desde Plaza Catalunya, el turista se encuentra a su paso la Fuente de Canaletas -conocida por ser el lugar de celebración de los títulos del FC Barcelona por parte de sus aficionados-, el Mercado de la Boquería -más de 300 puestos con productos típicos de la gastronomía catalana-, el Gran Teatro del Liceo -icono cultural y arquitectónico de la ciudad, y un emblema de la ópera mundial- y el Mirador de Colón -una columna de hierro en cuya cúspide se ubica el mirador, desde el que se puede disfrutar de unas espectaculares vistas panorámicas de Barcelona a 60 metros de altura-.
La Barceloneta, parada obligada en la ruta por Barcelona
Uno de los principales atractivos de Barcelona es su playa, la Barceloneta. El homónimo barrio cuenta con 200 años de historia y unas calles de aroma marinero, que desembocan en el paseo marítimo y en la playa. Esta cuenta con todos los servicios y es uno de los reclamos turísticos de la capital catalana.
Desde allí, el recorrido continúa en dirección a Montjuic, uno de los lugares con más historia de Barcelona. Esta montaña de 177 metros de altura es un excelente mirador para contemplar la ciudad. En su cima, se encuentra el Castillo, pero tiene mucho más. Un lugar repleto de atractivos, símbolo del paso de los Juegos Olímpicos por la ciudad (obligada parada en el Estado Olímpico) y que con el tiempo se ha convertido en una visita indispensable.
Descendiendo por esta montaña, la ruta en coche por Barcelona llega a Plaza de España. Otro lugar emblemático de la ciudad, en el que confluyen varias arterias importantes. Un espacio de 34.000 metros cuadrados -la plaza más grande de Cataluña- ideado por el arquitecto Ildefonso Cerdá y construida durante la Exposición Internacional de 1929. Hay varios grupos de esculturas que llaman la atención del visitante, pero ninguno como sus dos torres gemelas, inspiradas en los campaniles de Piazza San Marcos de Venecia.
La salida la haremos por Gran Vía de les Corts Catalanes, la calle más larga de España con 13 kilómetros de longitud, poniendo fin a esta ruta en coche por Barcelona.