Si por algo destaca una provincia como Girona es por su variedad geográfica. Desde las playas y calas vírgenes de la Costa Brava hasta los paisajes montañosos que limitan con el Pirineo catalán. Localidades pesqueras como Begur o la zona volcánica de La Garrotxa o Cap de Creus. Rutas y viajes en coche o moto en los que necesitas conocer dónde están los mejores precios tanto de la gasolina como del gasoil. ¿Como ahorrar al echar gasolina en Girona? Te lo contamos sin necesidad de perderte sus puntos de interés.
En este artículo encontrarás, además de paisajes de película, localidades con un gran patrimonio histórico. Y es que otro de los atractivos de Girona reside en su oferta cultural. En la provincia están tres de los museos más importantes en torno a la figura de Salvador Dalí. La Casa Museo de Portlligat, el Teatro Museo de Dalí en Figueres y el Castillo Gala Dalí de Púbol.
La oferta cultural de la ciudad de Girona
Girona capital es conocida como la «Ciudad de los Cuatro Ríos», ya que confluyen allí los ríos Onyar, Güell, Galligants y Ter. Este último da nombre al valle en el que se encuentra una ciudad con reminiscencias romanas, árabes y hebreas, tal y como nos muestra su casco antiguo.
Al fin y al cabo, es una ciudad fundada por los romanos en el siglo I a.C. Así lo demuestra la imponente muralla que protege la ciudad, cuyos restos llegan más allá de los Jardines de la Muralla. Destaca también la bonita Catedral de Santa María, lo mismo que la iglesia de Sant Nicolau y el monasterio benedictino de Sant Pere de Galligants.
Si cogemos la carretera, a tan solo 18 kilómetros encontramos un lago abrigado a las colinas de la Sierra de Rocacorba: Banyoles, parada obligada en todas las rutas en coche por Girona.
En la capital de la provincia puedes llenar el depósito en PQP GIRONA, en Carrer de Santa Coloma, 110.
Banyoles, en las proximidades del Parque Natural de La Garrotxa
Entre los ríos Fluviá y Terri se encuentra Banyoles. En las proximidades del Parque Natural de la Zona Volcánica de La Garrotxa. Destaca por la presencia de un lago de seis kilómetros de perímetro en el que poder pasear, pescar o hacer piragüismo.
Y buscando el oeste por carretera, cogiendo la C-66, llegaremos en cuestión de minutos a las zonas volcánicas de La Garrotxa y Olot.
Se trata de una comarca marcada por los bosques y volcanes que se alzan a su alrededor. Un paraje privilegiado para los amantes de la naturaleza, ya que encontraremos conos volcánicos y alrededor de 20 coladas de lava.
Olot, la capital, está protegida por cuatro volcanes: la Garrinada, Bisaroques, Montsacopa y Montolivet. En el entorno urbano, destaca el Puente Viejo románico de Besalú o la Vila Vella de Santa Pau. En la zona rural, la parada obligada se encuentra en los Humedales de la Moixina.
Siguiendo más hacia el norte, por la N-620, llegaremos a las cumbres pirenaicas de La Cerdaña. Y es que las montañas nevadas de esta zona de Girona también merecen una buena visita. Concretamente, las de la zona de La Cerdaña, donde los valles Ribes y Núria suavizan un paraje montañoso de caudalosos ríos.
Pals: «no merece una visita, sino cien»
En el bajo l’Empordá, sin salir de la provincia de Girona, visita otro de los pueblos más mágicos de Cataluña, Pals. Localidad de contrastes, que, en verano es visitada por su proximidad al litoral, en otoño toma mayor protagonismo su centro urbano, patrimonio histórico y artístico. Cómo no, el núcleo antiguo se mantiene fiel a sus orígenes, una villa medieval abrazada por una muralla.
En sus callejuelas conviven inalteradas por el tiempo y en perfecta armonía bóvedas, arcos de herradura o portaladas de estilo románico, gótico y barroco. La Plaça Major, las torres visigóticas, la iglesia, el castillo, la torre de las horas o la propia muralla se cruzarán en el camino del viajero hasta llegar al Mirador Josep Pla, donde se puede contemplar un atardecer de película de la llanura ampurdanesa. Como dijo el escritor y periodista catalán que da nombre a este ‘balcón’ medieval, “Pals no merece una visita, sino cien”.
¿Cómo ahorrar al echar gasolina en esta zona de Girona? En la estación de servicio de ANEU OIL BEGUR, en Carrer dels Salincs, Begur.
Y precisamente esta ruta por Girona concluye en Begur, otro lugar bellísimo de la zona. Sus calas han protagonizado anuncios y son uno de los grandes reclamos turísticos de la provincia. Imperdible las vistas del Mar Mediterráneo desde lo alto de su castillo, con las Islas Medas de fondo y un frondoso bosque de pinos en perfecta armonía con las casas blancas del pueblo.