Los carriles reversibles son una herramienta de las autoridades para descongestionar la circulación de vehículos en carretera o ciudad. Se establecen en una vía en el sentido contrario al habitual. La incorporación a ellos se hace a través de un acceso específico e indicado por los agentes de tráfico. A continuación, vamos a ver cómo se deben utilizar correctamente los carriles reversibles, aliados contra los atascos.
Lo primero que tenemos que saber es que estos carriles ya existen, no se construyen desde cero. Se trata de vías que, por ejemplo, en el caso de las carreteras, habilita en sentido contrario la Dirección General de Tráfico (DGT), con el objetivo de aumentar la capacidad de circulación. Los carriles reversibles tienen condición de provisionales, ya que, una vez aliviado el atasco, recuperan su sentido de la marcha habitual.
Los carriles reversibles, aliados contra los atascos, son utilizados en las grandes operaciones de salida o retorno de las vacaciones o los festivos. Ante el gran volumen circulatorio de las autovías en esos días, las autoridades habilitan un carril del sentido contrario para auxiliar la vía con más tráfico.
Por lo general, cuando se abre un carril reversible en una autovía, los agentes de tráfico habilitan un paso por el que se podrá acceder al sentido contrario a través de una mediana carente de barreras. El carril como tal se delimitará con conos reflectantes. Esta señalización, junto a las indicaciones de las autoridades, no es óbice para que los usuarios tengan que cumplir una serie de normas de circulación.
Normas de circulación en los carriles reversibles
- Velocidad más baja: en este carril será de entre 60 y 80 kilómetros por hora
- Sin extralimitaciones: prohibidos los adelantamientos
- Marcar siempre nuestra posición: es obligatorio llevar encendidas las luces de cruce o cortas mientras circulemos por el carril
- Prohibido el acceso a vehículos pesados: solo está permitido su utilización a motocicletas y turismos
Los carriles reversibles, aliados contra los atascos, también se pueden ver en las ciudades que cuenten con volúmenes de tráfico elevados. En este caso, la señalización es permanente y se realiza mediante líneas dobles discontinuas a ambos lados del carril. Además de las flechas en uno y otro sentido, los carriles reversibles en ciudad cuentan con el apoyo de paneles de información que indican el sentido de la marcha.
Dentro de los carriles reversibles de ciudad, es importante respetar las normas de circulación del entorno urbano. Además de no superar en ningún caso los 50 kilómetros por hora de velocidad máxima, se debe circular con las luces de cruce encendidas.