La velocidad máxima ha sido una de las grandes ambiciones en la industria del motor. Como en el mundo de las motos, los fabricantes especializados en automóviles deportivos aspiran a desarrollar los coches más rápidos del mundo. En los últimos años, esta particular carrera al sprint ha entrado en su apogeo, con varios récords de velocidad máxima superados en un corto espacio de tiempo por distintos coches.
Marcas de altísimas prestaciones como Koenigsegg, SSC, Bugatti o Hennessey han tenido en su poder la distinción del coche más rápido del mundo en la última década. 400, 440, 490 o, por fin, superar la barrera de los 500 kilómetros por hora de velocidad máxima es lo que ha ocurrido en los últimos años. Una auténtica barbaridad, teniendo en cuenta que el primer coche «velocista» de la historia fue el Benz Velo: 19 km/h en 1894.
A continuación, te contamos cuáles son los coches más rápidos del mundo.
Encabeza el ranking el SSC Tuatara, que en otoño de 2020 alcanzó los 508,73 kilómetros por hora. Aunque partía de una velocidad oficial de 482 km/h, este hypecar norteamericano registró el nuevo récord gracias a cumplir con los requisitos de homologación:
- Coche de serie, sin modificaciones
- Recorrer la misma distancia dos veces, una en cada sentido de la marcha
- Neumáticos de carretera y carburante de «calle» (prohibido de competición)
- Velocidad registrada por GPS certificado
El SSC Tuatara tiene un motor 6.0 de ocho cilindros en «V» y, con bioetanol E98, puede rendir casi 1.800 caballos de potencia máxima.
Antes del Tuatara ningún otro coche fue capaz de superar el umbral de los 500 km/h de velocidad máxima. Sin embargo, sí que varias marcas lo intentaron y se quedaron muy cerca. A continuación, te contamos cuáles fueron los coches más rápidos del mundo… hasta la llegada del Tuatara.
Bugatti Chiron Super Sport 300+
Como una edición especial por su 110 aniversario, Bugatti desarrolló en 2019 el Chiron Super Sport 300+. El súper deportivo francés está construido en fibra carbono y tiene un motor W16 de ocho litros de cilindrada que rinde 1.600 CV. Pilotado por Andy Wallace, campeón de Las 24 Horas de Le Mans, alcanzó una velocidad punta de 490 km/h.
Henessey Venom GT F5
El «F5» es una evolución del modelo original del mismo nombre. Con un motor V8 biturbo de 1.600 CV y un peso aligerado para la ocasión (menos de 1.350 kilogramos), el Henessey Venom GT F5 logró una velocidad máxima de 484 km/h.
Koenigsegg Agera RS
La marca sueca mantiene su particular duelo con Bugatti por la corona de la velocidad. De hecho, durante algunos meses en 2017, el Koenigsegg Agera RS se convirtió en el coche más rápido del mundo gracias a los 447 km/h registrados.